Para agosto de 1976 fui designado por el Comando de Jefatura, Delegado de la Policía Federal en la Ciudad de San Nicolás, Pcia. De Bs. As. Demás está decir que era una ciudad que vivía atemorizada pues la acción de las organizaciones terroristas se había hecho notar con crímenes y atentados y se movían con impunidad.