El despligue del aparato generó gran atención periodística y erróneamente se dijo que la aeronave había sido derribada en combate en Malvinas. En rigor de verdad el avión caído fue el TC-63 cuyos restos, y su tripulación descansan en el fondo del mar
En cuanto al TC -67, si bien en un principio era recuperable, por falta de fondos esto no se llevo a cabo, quedando la aeronave almacenada a la espera de recursos que nunca llegaron, de modo que el Hercules comenzo a ser canibalizado sacándosele cualquier componente de utilidad para el resto de la flota de Hercules.
De acuerdo al foro especializado defensanacional.argentina.net,el golpe de gracia llego en 2007 cuando en una lamentable, ridicula e incomprensible resolucion la Fuerza Aerea resolvio vender las alas del TC-67 a la Fuerza Aerea de Paquistan.