El capitán de navío -retirado- Washington Bárcena, comandante del ARA Bouchard, uno de los dos destructores que intervino en el rescate de los náufragos del crucero General Belgrano en 1982, dijo que el hundimiento del buque en el contexto de la guerra por Malvinas significó "un golpe muy grande" que causó "un gran dolor" y "costó mucho materialmente y espiritualmente".