REDACCION TIEMPO MILITAR.
Por Gabriel D´Amico y Santiago M. Sinopoli
A más de cuatro décadas del retorno democrático, la forma en que una sociedad decide juzgar y narrar su pasado violento no constituye un mero ejercicio de memoria, sino una decisión profundamente jurídica, política y moral. Argentina y Sudáfrica, atravesadas ambas por conflictos internos de alta intensidad y prolongada violencia política, ofrecen un contraste revelador sobre cómo enfrentar ese pasado sin sacrificar los principios estructurales del Estado de Derecho.