La Asociación Profesional Policía de la Provincia de Buenos Aires le recordó al magistrado que no solo fue juez criminal de sentencia durante todo el proceso militar sino también de otras administraciones de facto y que su nominación a Juez de la Corte Suprema, tuvo 831 impugnaciones y sólo 134 adhesiones pese a lo cual fue designado.
Si algún agravio nos faltaba recibir a toda la familia policial, era la infame calificación de golpistas. Pero que esta inmerecida injuria pública provenga de un jurista con prestigio internacional como es el Dr. Eugenio Raúl Zaffaroni es desconcertante, además de grave. Solamente podemos encontrar alguna explicación al conocer los antecedentes personales y cívicos de este señor, que no son nada ejemplares para un magistrado de tan alta investidura.
Hemos utilizando el método que tanto pregonara y nos enseñara su padrino político, Néstor Kirchner: La Memoria.
Así es que logramos recordar claramente, de quién se presume hoy de exhibir una ética y moral impoluta como para acusarnos a los policías de golpistas, lo siguiente: