Por ROBERTO GARCIA MORITAN
La soberanía e integridad territorial de Ucrania, el segundo país en superficie más grande de Europa, se encuentra gravemente comprometida por la invasión militar de la Federación de Rusia. La agresión del Kremlin, que involucra una disputa geopolítica en Europa del Este, pone en vilo a la seguridad global e incluso la supervivencia del sistema multilateral nacido en San Francisco en 1945. La escalada iniciada por Rusia podría tener una aceleración con derivaciones eventuales en el campo del armamento nuclear. Por lo pronto, el presidente Vladimir Putin ha expresado la intención de utilizar ojivas atómicas en el caso de que Kiev se integre a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Una advertencia coercitiva que, entre otras consecuencias para la paz mundial, pone en jaque la validez del concepto de zonas libres de armamento nuclear. Ucrania tiene status de territorio desnuclearizado desde 1996, tras el incidente de Chernóbil.