República Argentina: 10:59:49pm

En concreto, la cúpula oficialista de la estatal activó un Procedimiento Preventivo de Crisis (PPC) ante el Ministerio de Trabajo de esa provincia y anticipó que apuntará a reducir el tamaño operativa de la empresa mediante un cronograma de despidos, retiros y jubilaciones anticipadas. En el seno de La Libertad Avanza (LLA) se plantea la intención de recortar al menos 150 puestos de trabajo del total de 700 operarios con los que hoy cuenta la fábrica en cuestión.

El PPC presentado tiene como objetivo inicial achicar hasta en un 30% la carga salarial que hoy exhibe FADEA. Según el Gobierno nacional, la compañía presenta una deuda acumulada del orden de los $70.000 millones y su operatividad sigue fuertemente atada a los aportados del Estado.

El inconveniente que abre el PPC está en los contratos que la firma tiene establecidos con distintos actores privados. En torno a FADEA no faltan quienes afirman que achicar el plantel de empleados podría redundar en la pérdida de acuerdos de mantenimiento y provisión de piezas.

FADEA y el riesgo de perder contratos con aerolíneas privadas

Hoy por hoy, la fábrica posee contratos vigentes con compañías como la mencionada Embraer, Flybondi, JetSmart y la también brasileña Akaer, especializada en el desarrollo de soluciones aeroespaciales y de defensa.

Con Embraer, un gigante de la aviación mundial, la situación viene poniéndose tirante: hace muy poco, la compañía del vecino país adelantó un pago de casi u$s2 millones para la compra de insumos con el fin de generar las piezas que requieren algunos modelos de la aérea.

Pero ocurrió que, por falta de caja, FADEA habría utilizado parte de esos montos para cubrir salarios y, de esa forma, la entrega de partes a Embraer entró en una instancia de demoras que tiene preocupados a los brasileños. Una eventual caída del contrato con esa firma, reconocen las voces interpeladas, sería fatal para la supervivencia de la fábrica cordobesa.

En simultáneo al inicio del PPC, la directiva de la compañía viene de realizar una asamblea extraordinaria donde también se sentaron las bases para iniciar un proceso de capitalización que, aseguran en torno a la firma, le permitiría a FADEA acceder a líneas de crédito productivo.

La apertura del Procedimiento Preventivo de Crisis cobró forma a partir, también, de un diálogo fluido con los gremios que ostentan presencia en la fábrica de aviones. La Asociación Personal Aeronáutico (APA), la Asociación de Personal Técnico Aeronáutico (APTA) y el Sindicato Técnico Aeronáutico (STA) son las organizaciones que pisan fuerte entre las filas de operarios de la empresa.

Hace poco más de una semana, los gremios activaron una movilización exigiendo que la compañía cumpla con el pago de los salarios luego de que apenas se cancelara el 30% de cada monto a principios de mes, y a mediados de mayo se depositaran $500.000 más a los trabajadores no jerárquicos.

Por estas horas, tanto la cúpula de FADEA como los sindicatos parecen mostrar sintonía en cuanto a asumir al PPC como la opción más efectiva a los fines de sostener la continuidad operativa de la fábrica estatal.

Descartada la posibilidad de que Córdoba asuma el control de FADEA

Por otra parte, una posibilidad que se barajaba para intentar recuperar la salud financiera de la compañía era traspasar su control al gobierno de la provincia de Córdoba. Pero la administración que encabeza Martín Llaryora rechazó la alternativa alegando falta de fondos para sostener la continuidad de los operarios de FADEA.

 

En este contexto, los interrogantes respecto de cómo se seguirá adelante atraviesan tanto a los directivos de la empresa como a sus empleados. La suspensión de los contratos que la Fuerza Aérea mantenía con la empresa, que representaban casi el 80% de la labor que desarrollaba la fábrica, reaviva las versiones que anticipan una probable privatización.

Como ya expuso iProfesional, en torno a Nación también se habla de promover el desembarco de capitales externos. Desde ese punto de vista, existe la posibilidad que el alineamiento de Milei con Estados Unidos, la OTAN e Israel, redunde en el arribo de inversores militares de ese eje en la planta de aviones.

 

 

 

Más Leídas