Durante el gobierno constitucional del presidente Luder se ordenó a las Fuerzas Armadas “el aniquilamiento del accionar de los grupos terroristas”. Así comenzó una guerra con aberraciones de ambos lados. Muchos militares lucharon de manera leal y cumpliendo órdenes y muchos fueron encarcelados sin ninguna condena efectiva, con juicios y testigos cuestionables y varios murieron ancianos y enfermos en la cárcel.
Pero más allá de esta discusión eterna en nuestro querido país y que provoca una grieta, siempre me llamó la atención la discusión sobre algo que tendría que ser incuestionable: ¿cuántos fueron los desaparecidos? El exmontonero Luis Labraña lo admitió con total cinismo: él estaba exiliado en Ámsterdam cuando las Madres llegaron con una lista de entre 3700 y 4700 desaparecidos y pedían ayuda económica. A los europeos les parecían pocos para justificar el apoyo económico. Entonces él inventó el número de 30.000 y quedó esa cifra, y lo describió como que fue una necesidad. Además, llegando a ese número mágico, pudo considerarse delito de lesa humanidad y como tal no prescribe. Se hicieron distintos estudios con rigurosidad y ya con el gobierno de Alfonsín la Conadep llegó a la cuenta de 8961 personas. Kirchner en el libro Nunca más habló de 7158 y Cristina Kirchner con la Secretaría de Derechos Humanos en 7300, número también difundido por el gobierno de Macri. Pero se sigue hablando de 30.000 y se pagaron como “indemnización” 240.000 dólares a cada una de las familias de esos 30.000 desaparecidos.
La pregunta es: si oficialmente los desaparecidos fueron 7300, ¿quién cobró la diferencia? El cálculo es muy simple: (30.000 - 7300) x 240.000 dólares es igual a 5448 millones de dólares.
El gobierno del presidente Milei se ha propuesto terminar con los “curros”. El descripto tendría que ser investigado y que la Justicia castigue a todos los implicados que lucraron con un hecho tan lamentable y terminar para siempre con el mito de los 30.000 desaparecidos. Asimismo, para ser equitativos con el trato recibido por los terroristas, se debería dejar en libertad a muchos militares aún presos injustamente.
Eduardo Firvida
DNI 4.305.435