Ahora, me pregunto: ¿qué hacemos con aquel mandato evangélico “porque estuve preso y me visitasteis”? ¿Borramos la cita de Mateo 25:34-36, señor obispo de Zárate-Campana?
¡Coherencia, por favor! En fin.
Juan Carlos Sorondo
Esta dirección de correo electrónico está protegida contra spambots. Usted necesita tener Javascript activado para poder verla.