El gremialista, quien lidera el Sindicato de Policías del Uruguay (Sinpolur) e integra la Unión de Sindicatos Policiales, afirmó que "esperábamos que hubiera represión, según versiones del jefe de Canelones (Erode Ruiz). Hicimos contra-inteligencia para que no se distorsione la realidad", dijo.
Según Ferreira, la próxima movilización se llevará a cabo el martes de la semana entrante (10 enero 2012) en la entrada al Puerto de Montevideo.
A las 17 horas de ayer, unos 40 dirigentes de las dos corrientes sindicales de la Policía -Unión Nacional de Sindicatos Policiales (USIP) y Coordinadora Nacional de Sindicatos Policiales (Conasip)- obstaculizaron el tránsito de aquellos vehículos que circulaban por la ruta Interbalnearia hacia el Este del país. La movilización -inédita en el país- se desarrolló a 80 metros del peaje Pando.
Los gremialistas de la Policía desplegaron en la ruta carteles con alusiones al conflicto que mantienen con autoridades de la cartera. "El Ministerio del Interior viola acuerdos. Basta de abusos con la Orden N° 12. Policías en conflicto", rezaba un cartel. Otro señalaba: "Basta de represión antisindical". Y un tercero reclamaba "salarios y condiciones de trabajo dignas".
Al minuto de que comenzó la medida de obstaculizar el tránsito, la fila de autos había alcanzado los 100 metros.
El dirigente del Pit-Cnt Gustavo Signorelle se movía como director de orquesta de la movilización. "No corten toda la ruta, pero arrímense", indicaba a los policías. Al observar que varios efectivos estaban nerviosos porque esta era la primera vez que participaban de una movilización de esas características, Signorelle alertó: "Tranquilos que ya estamos acá. No caigan en provocaciones (de los conductores de los autos). Sigan entregando panfletos".
Signorelle, quien pertenece a la corriente Articulación del Pit-Cnt -el ala más afín al gobierno- se desplazaba de un lado a otro de la ruta, con el termo bajo el brazo y un cigarro apagado en la comisura de los labios, dando instrucciones. "Colorado, estamos bien así. No hay que pasar a la otra senda. No viene nadie del Este", le indicaba a un gremialista.
Los policías caminaban excitados de un lado a otro: tiraban panfletos al aire, se sonreían con complicidad y respondían a aquellos autos que tocaban bocina saludándolos. También miraban con caras de pocos amigos a los que los insultaban por la demora en llegar al peaje.
17.15 HORAS. Los policías cruzaron las pancartas en la ruta y cortaron totalmente la senda del tránsito hacia el Este. En ese momento, se acercaron a Signorelle el subjefe de Policía de Canelones, Luis Mendoza, y el director de Seguridad canario, Víctor Trezza. Tras saludar a los sindicalistas, Mendoza le hizo una seña a Signorelle y éste asintió. "Levanten, levanten", gritó el dirigente sindical. Los policías se replegaron hacia los costados y los autos reanudaron la marcha.
Mendoza dijo que "los policías tienen el derecho de expresarse gremialmente pero no a coartar el derecho de las personas a circular libremente".
Uno de los gremialistas se acercó a Mendoza y se quejó de que efectivos de Policía Técnica de Canelones estaban filmando a los manifestantes. Mendoza respondió que los retiraría.
Mendoza dijo a El País que la intención no era reprimir la movilización policial. "Venimos aquí con el director de Seguridad. No tenemos el apoyo de un grupo de choque", destacó.
17.49 HORAS. La cantidad de autos que esperan para pasar por el peaje Pando llegó a su punto más alto: casi un kilómetro. Es decir, abarcaba todo el puente del arroyo hasta la confluencia de la ruta Interbalnearia y la avenida Giannattasio. Tres minutos más tarde, los gremialistas volvieron a cortar totalmente la senda.
Mendoza y Trezza se movieron hacia la manifestación. Pero no llegaron a acercarse. Los policías se dispersaron.
"Seguridad comprometida por el sindicato"
El subsecretario del Ministerio del Interior, Jorge Vázquez, consideró "inoportunas" e "improcedentes" las medidas adoptadas por los sindicatos policiales.
"Cuando la obligación de la Policía es bajar el número de delitos y brindar mayor seguridad a la población, este tipo de conflictos y este tipo de medidas generan mayor inseguridad y confunden a la población", señaló en una conferencia de prensa donde no aceptó preguntas.
Vázquez culpó al Pit-Cnt de no cumplir un acuerdo que fijaría la hora de una reunión entre autoridades de la cartera, directivos de la central obrera y de los gremios policiales y desactivaría la movilización de los policías en la Interbalnearia.
"En el día de ayer (miércoles 4) y en las condiciones establecidas hasta ese momento, se acordó con una delegación del Pit-Cnt realizar una reunión tripartita en el Ministerio de Trabajo con el sindicato policial la próxima semana", dijo. El jerarca recordó que en el encuentro que mantuvo con el Pit-Cnt "hubo un principio de acuerdo del tratamiento con el que se iban a encarar los puntos que aparecen en la plataforma que el Sindicato de Policías elaboró".
Vázquez añadió que "con esa misma delegación se acordó que a partir del mediodía de hoy (por ayer) fijaríamos una hora de reunión -hecho que no se concretó- quedando el Ministerio del Interior a la espera".
Lo que molestó al Ministerio del Interior es que los sindicatos policiales se movilizaran en la Interbalnearia. Media hora después de finalizada la medida gremial, autoridades de la cartera convocaron a la prensa.
Vázquez recordó que la reestructura en la Jefatura de Montevideo "no afecta" las condiciones de trabajo de los funcionarios sino que "las benefician".
También destacó las mejoras salariales que tendrá la Policía este año, que representan un 20% de aumento.
Otro punto de la plataforma de los Sindicatos Policiales es una disminución de la carga horaria -pasar de 8 horas a 6 horas diarias. "Cuando las condiciones de seguridad y la población nos piden mayor presencia policial, el Sindicato Policial plantea de hecho: menos policías en las calles, menos patrullaje, menos resultados", afirmó Vázquez.
El País Digital