Mamuka Mamulashvili, comandante de la Legión Nacional Georgiana creada en 2014 con aproximadamente 700 integrantes, descartó que el fusilamiento grabado de un soldado ruso sea un crimen de guerra por el "estatus de ocupante" del asesinado. También, haber ordenado "no tomar como prisionero a ningún ruso" y que ordenó matar a los soldados rusos incluso si quisieran rendirse.
A finales de marzo, se conocieron imágenes mostrando a militares ucranianos que disparaban a las piernas de militares rusos apresados que eran sacados de una furgoneta, información disponible en la web.actualidad.rt.com/actualidad/426200.
El 6 de abril el diario The New York Times confirmó la autenticidad del video de soldados ucranianos masacrando a militares rusos capturados. Las imágenes fueron de alrededor del 30 de marzo a 11 kms al suroeste de Bucha cuando se retiraron tropas rusas de Kiev. The New York Times explica que los soldados ucranianos son identificables por los parches con la bandera y las señales distintivas azules; también dicen "gloria a Ucrania".
La Secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, cuando fue preguntada si había visto las grabaciones, respondió con ambigüedades. De la misma forma, respecto del informe de The New York Times que confirmó la autenticidad de un video que muestra a militares ucranianos masacrando a soldados rusos heridos. Jean Psaki respondió: "He visto el video, no tengo ninguna confirmación o validación del video o el informe".
Al día siguiente, 7 de abril se conoció las declaraciones de un ex oficial norteamericano Scott Ritter poniendo en duda la información de los medios y responsabilizaría a Ucrania por lo ocurrido en Bucha. Agrego que podrían ser ucranianos los que realizaron la masacre y sugirió autopsias para determinar la fecha de las muertes. Destacó que los rusos no destruyen la infraestructura militar. Twitter suspendió su cuenta.
El 8 de abril, una conversación telefónica de un periodista ( grabada y obtenida por actualidad. rt.com) no encontró evidencias de "ninguna ejecución" en la localidad de Borodianka. El periodista señaló que habló con varias ancianas, que respondieron que "los militares rusos fueron amables y les dieron provisiones... no vimos nada de eso”.
Un oficial del Servicio de Seguridad de Ucrania declaró que fueron los ucranianos quienes "estuvieron saqueando todo ese tiempo" en Kújari. Una llamada interceptada, entre dos oficiales del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU), reveló que en Kújari (a 60 km. de Bucha) nacionalistas ucranianos bombardearon y grabaron un video para entregar a medios occidentales, dijo Rusia. Los rusos se retiraron de Bucha el 30 de marzo y las supuestas pruebas de crímenes aparecieron 4 días después que se retiraron los rusos.
Piden pruebas que no fue un montaje
El 9 de abril se supo que el presidente de Ucrania, Vladimir Zelenski dijo que uno de los líderes de la UE le pidió "mostrarle pruebas de que no fue un montaje" lo ocurrido en Bucha, y no reveló la identidad, en entrevista con el diario alemán Bild, y el periodista Paul Ronzheimer . Precisó que no era el canciller alemán Olaf Scholz.
Lavrov, el Canciller ruso afirmo que Occidente convierte a Ucrania "en un trampolín para la represión definitiva de Rusia".. También agrego “… si Bucha sigue siendo utilizado de alguna forma a lo largo de varias semanas, [Ucrania y Occidente] se callaron muy rápidamente sobre Kramatorsk", refiriéndose al ataque con misiles Tochka-U de militares ucranianos contra Donbass.
Putin denuncia que lo de Bucha es una operación psicológica
El 12 de abril Putin afirmó: Lo de Bucha en Ucrania es tan "falso" como lo de las armas químicas en Siria. Además indicó que Lukashenko (presidente de Bielorusia) le entregó documentos sobre los sucesos en Bucha, que revelan "cómo y quién [...] viajó a la localidad y preparó el escenario para esta provocación". El mandatario bielorruso precisó que el Reino Unido organizó "la operación psicológica" en Bucha. "
En Síntesis
Los analistas concluyen que el caso Bucha (Ucrania) es una mentira fabricada mediante una operación de guerra psicológica, concretada por medio de una construcción mediática de dos minutos de duración, que busca mostrar al mundo una versión irreal de lo ocurrido, después del retiro de las tropas rusas el 30 de marzo. Que existen medios de comunicación social que reproducen información sin ser corroborada fehacientemente, buscando desprestigiar a Rusia y justificar el alargamiento de un conflicto.
Para los analistas, este montaje mediático se hizo evidente cuando Rusia pidió convocar al Consejo de Seguridad de la ONU, y se opuso Gran Bretaña.
Respecto del pedido del Presidente de EE. UU., de crear un tribunal por Bucha, la portavoz de su Cancillería rusa, María Zajárova sugirió juzgar antes a los responsables de los bombardeos en Yugoslavia y la ocupación de Irak.
El video, cuya autenticidad confirmó el diario The New York Times, exhibe los cuerpos de militares rusos y explica que los soldados ucranianos llevan parches con la bandera y las señales distintivas azules. Ponen más dudas las declaraciones ambiguas hechas por la Secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, cuando le fue preguntado por el video y lo afirmado por el The New York Times.
Las afirmaciones del ex oficial de inteligencia del Cuerpo de Marines de EE. UU. Scott Ritter, ponen en duda lo informado por los medios de comunicación social y responsabilizaría a Ucrania por lo ocurrido. El ex oficial sospecha que podían ser los ucranianos quienes perpetraron la masacre y pidió autopsias para conocer la fecha de las muertes. Dijo también que todas las denuncias deben investigarse.
El politólogo y sociólogo Atilio Borón, opina que para realizar una investigación imparcial hace falta un equipo multilateral, no alineados con Washington. En Occidente se lleva a cabo "una campaña de demonización de toda Rusia".
Que la comunidad internacional debe oponerse, a la codicia de los complejos militares que gobiernan algunas potencias, vendiendo armamentos, sin importarle el destino final y el uso que le darán. Estas muchas veces, son causantes de millones de muertes, mutilaciones y heridas, destrucción de Estados, torturas, sanciones económicas para asfixiar a poblaciones enteras, entre otras.
