Fadea al igual que otras áreas estatales se había convertido en un hacinamiento de miles de ñoquis, sus pérdidas eran millonarias y solo se utilizaba para desmantelar.
En 2016 el gobierno de Mauricio Macri, cambió su directorio y saneó su estructura, prescindió de los ñoquis y comenzó su explotación también en el ámbito privado. Consecuentemente luego de ocho años de nada y perdidas, Fadea volvió a construir aviones Pampa III, moderniza los Hércules C130 nuestros y de otros países, y realiza mantenimiento de aviones de líneas privadas.
Así se convirtió en una empresa autosuficiente, productiva y orgullo cordobés.
Sin embargo, el actual ejecutivo nacional sigue apostando a la mentira para intentar captar incautos, sin saber que por lo menos a esta historia la conocemos todos.