Se trata del Coronel Cayetano Fiorini, de 92 años de edad, quien sufría severos problemas de salud, trasplantado en un riñón y ceguera total y de Liendo Roca, ex Juez, de 80 años y también con un serio cuadro cardíaco.
En ambos casos sus abogados habían planteado ante el Tribunal Oral Federal (TOF) la delicada situación de salud de los dos ancianos y que "su sola presencia en las audiencias y el estrés que eso conlleva podrían poner en riesgo sus vidas", pero esto era desechado por los miembros del tribunal a pesar de los certificados médicos presentados por la defensa y sus familiares.
LA NACION, recordó que la sala IV de la Cámara Federal de Casación Penal, había suspendido las audiencias de este juicio que se inició el pasado 22 de agosto, a raíz de serias recusaciones planteadas por el abogado Miguel Ángel Torres, defensor de uno de los acusados, el Coronel Jorge D'Amico.
Entre los planteos esgrimidos por Torres en su escrito no solo figuraban las situaciones de salud de varios de los imputados, sino que además desechaba la imparcialidad del Tribunal Oral Federal debido a que dos sus integrantes habían pertenecido al Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) y el restante había sido querellante por la APDH en otros juicios de lesa humanidad.
La Nación señaló que el tribunal está compuesto por María Alicia Noli, tucumana y reconocida ex militante del ERP con el nombre de "Liliana", José María Pérez Villalobo, cordobés y también ex miembro del ERP y Juan Ramos Padilla, porteño y que fuera querellante por la APDH en otros juicios de lesa humanidad.
El abogado Miguel Ángel Torres, se mostró acongojado por la noticia y en diálogo con LA NACION aseguró: "hemos tomado conocimiento de la muerte de Cayetano Fiorini, un señor sordo, ciego, con un trasplante renal, una persona que estaba muy grave y que no podía ser sometida a juicio y el doctor Liendo Roca, de muy avanzada edad. Ambos no soportaron el cansancio físico y mental de las audiencias interminables".