El asesinato del capitán Humberto Viola y su hija fue un crimen cometido por el Ejército Revolucionario del Pueblo el 1 de diciembre de 1974 en San Miguel de Tucumán. Sus compañeros de promoción evocaron a ambos en ceremonias íntimas realizadas en distintos puntos del país.
Humberto Viola fue atacado cuando conducía su automóvil junto con su esposa María Cristina Picón y sus hijas María Cristina de tres años y María Fernanda de cinco, al llegar a la casa de sus padres. Su hija María Cristina también fue asesinada en tanto que su hija María Fernanda resultó herida gravemente, ambas con disparos en la cabeza. La esposa del capitán, embarazada de cinco meses, resultó ilesa.
Un parte de guerra atribuido a la Compañía de Monte Ramón Rosa Jiménez del ERP, reproducido por Wikipedia, describe los hechos de esta manera:
A las 13:13 se acerca el objetivo. Se marca la señal y se retira el compañero. Se aproximan el auto operativo y el de apoyo separados 50 a 60 metros; queda el de apoyo semicruzado en la calle cortando el tráfico y apoyando a los compañeros. El automóvil operativo se aproxima hasta la misma altura que el objetivo —el auto y sus ocupantes— quedando medio auto adelantado. Siempre en los chequeos el sujeto descendía, en esta oportunidad la que descendió fue la esposa, quedando él al volante a la espera, seguramente para guardar el auto en el garaje. Al frenar el automóvil operativo disparan el primer escopetazo que da en el parante delantero izquierdo del parabrisas, el sujeto se agacha en ese momento y los balines dan de rebote sobre la hija de tres años que estaba atrás. El compañero de la ametralladora desciende y metiendo el arma por la ventanilla, dispara una ráfaga corta (4) tiros que dan en el sujeto que alcanza a descender, la ametralladora se traba, pero los disparos le dan a la altura de la base del pulmón izquierdo desde atrás, se adelanta mas y dispara con su pistola y remata al capitán con un tiro en la cabeza y retoma el auto, mientras que el camarada de apoyo dispara a quemarropa con su ametralladora, hiriendo a la hija de cinco años que corre escapando hacia delante. Ejecutada la operación, la retirada se cumple correctamente. El abandono de los autos se realizó según lo planificado, lo mismo que la retirada de los compañeros.2
El grupo que realizó el ataque estaba al mando de Hugo Irurzun y sus otros integrantes fueron Francisco Antonio Carrizo, José Martín Paz, Rubén Jesús Emperador, Fermín Ángel Nuñez, Miguel Norberto Vivanco y el sueco-chileno Svante Grände. La justicia condenó por los homicidios del capitán Viola y de María Cristina, y de la tentativa de homicidio contra María Fernanda a reclusión perpetua a Paz, Emperador, Nuñez y Vivanco a finales del año 1976 y a Carrizo a fines del año 1982.34
Paz, Carrizo, Emperador y Núñez estuvieron detenidos a disposición del Poder Ejecutivo hasta que esa orden fue dejada sin efecto por el decreto secreto 382 del 17 de febrero de 1983.5 En razón de la ley 23070 la reclusión perpetua estaba limitada a un máximo de 20 años y además además cada 2 días de prisión se computaba como 3 por lo que Carrizo, Paz y Emperador quedaron en libertad condicional en diciembre de 1988 y Nuñez en julio de 1989. Vivanco había fallecido en 1980.3 Hugo Irurzún resultó muerto el 18 de septiembre de 1980 en Asunción del Paraguay por la policía paraguaya que lo buscaba por su participación en el asesinato de Anastasio Somoza Debayle ocurrido ese día, Svante Grande fue muerto durante su actividad guerrillera -tenía el grado de teniente en el ERP- en el monte tucumano el 17 de diciembre de 19756o el 14 de octubre de 1975. 7 En ese momento era parte de la compañía guerrillera de montaña llamada "Ramón Rosa Jiménez".8 y Carrizo falleció a fines de 1982. Todos fueron generosamente indemnizados por las autoridades democráticas