Carta de lectores publicada en www.lanacion.com.ar
El 29 de abril se cumple el aniversario del asesinato del teniente primero (post mortem) Mario César Asúa y de las heridas de bala que sufrió el conscripto Hugo Alberto Vacca, quien quedó cuadripléjico y falleció tiempo después.
Los terroristas lo hicieron cerca de Pilar, sobre el puente del río Luján, en la ruta nacional 8. Robaron munición y armamento para aterrorizar a la población. El atentado de 30 personas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) fue durante 1971 y causó la muerte del primer miembro de nuestras FF.AA. Actualmente esos asesinos, libres, siguen produciendo una grieta en la sociedad argentina. Hoy esa guerra que nos impusieron continúa con otros nombres, tácticas y cambios culturales.
Gloria a los que luchan ese combate que no terminó, que ha dejado muchos muertos como Asúa y Vacca, también muchos injustamente presos y muertos en prisión por defender a su patria de una invasión cultural no deseada.
En nombre de la promoción, firmo sabiendo que todos los integrantes avalamos lo escrito. ¡No cambien la verdadera historia!
Enrique Dietrich
DNI 4.534.663