En una breve columna en el diario La Nación, el sábado (11 ene 2013) uno de los principales articulistas de ese rotativo, Carlos Pagni, desliza, subjetiva e implícitamente, un interrogante: si el flamante teniente general César Milani pondrá al Ejército al pleno servicio de los ideales que postula el kirchnerismo, como lo ha declamado, o si, repitiendo la tradición del pasado, terminará enfrentándose a él.
El artículo, abierto a todas las especulaciones e interpretaciones, señaló:
Con su pretensión de comandar un Ejército incorporado a una facción política, el teniente general César Milani se ha afiliado a una larga tradición. En 1951, Juan Perón entregó la Medalla de la Lealtad al general Dalmiro Videla Balaguer por su obediencia durante el alzamiento de Benjamín Menéndez. Pero en 1955, Videla se sumó a la Revolución Libertadora, que lo designó interventor en Córdoba. "Videla, Videlita, devolvé la medallita", le cantaban los peronistas. También el almirante Isaac Rojas había recibido la medalla.
A Isabel Perón muchos militares le ofrecieron ser parte del "proyecto". El general Alberto Numa Laplane propuso un"profesionalismo integrado". Aunque ninguno llegó al grado de subordinación y de intimidad con Isabel como Emilio Eduardo Massera, el jefe de la Armada.
Milani tiene también precursores regionales. Cuando se desató el golpe de 1973 en Chile, Salvador Allende ordenó: "Llamen a Augusto, que es de los nuestros". Pero Pinochet, incomunicado, encabezaba la asonada. El ensayo de Milani debe superar, por lo visto, varios fracasos anteriores”.
También el diario Clarín se ocupó de Milani resaltando como hace uso de las partidas extras que le asignó el Gobierno para mejorar haberes y equipamiento de personal en actividad destacado en zonas conflictivas de control del narcotráfico y de inteligencia. Estos suplementos, según el rotativo, se tornan atractivos porque llegan a duplicar el haber mensual regular de un militar. De hecho amplían aún más, a niveles abismales, la diferencia con los retirados.
(el análisis de esta situación en la edición impresa de febrero)