En la actualidad las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos hacen frente a un problema bastante serio, como es el suicidio de muchos militares. Este problema es mucho más grave ahora que años anteriores.Durante los últimos siete años la cantidad de militares estadounidenses que deliberadamente se quitaron la vida, aumentó tres veces. Desde 2005 a 2011, se suicidaron más de dos mil uniformados estadounidenses, según lo revelaron el pasado fin de semana varios informes de prensa originados en fuentes militares de Washington.
En noviembre de 2011, la prensa estadounidense publicó un artículo del Centro de Seguridad de los EE.UU, según el cual en 2010 se habían suicidado 468 militares, mientras las bajas en ese mismo año eran de 462 hombres. Según los expertos, hoy cada 36 horas se suicida un militar estadounidense y cada 80 horas se suicida (termina con su vida voluntariamente) un veterano de un conflicto bélico.
Según el Pentágono, uno de los factores que influyen en el aumento de los suicidios, es la rotación frecuente de las tropas estadounidenses en las zonas de conflicto y su participación permanente en los conflictos bélicos. La estadística marca que la tasa más alta de suicidios se produjo después del segundo o tercer envío (visita o permanencia) a Irak o Afganistán. Entre otras razones que llevarían a tomar esta drástica determinación se contarían: problemas financieros, el estrés, las aspiraciones no realizadas respecto de la vida y del servicio militar y los problemas familiares.
Expertos castrenses subrayan también como un factor específico del aumento del suicidio en las Fuerzas Armadas estadounidenses, al sistema de contratación existente y que ya lo consideran equivocado. Las FF. AA. de ese país resultaron que no eran capaces de librar prolongados combates. Como fue evidente, el moderno y sofisticado armamento con que cuentan y la prosperidad económica no son la garantía del espíritu combativo de un militar, que es la base de la conducción del combate exitoso.
El contratado, está dispuesto a servir por dinero, pero “se rinde o se quiebra” cuando los sufrimientos u obligaciones del servicio militar y el riesgo superan el límite de la retribución económica. En las condiciones de la guerra real la estabilidad y firmeza de las Fuerzas Armadas de este tipo, es decir conformada por contratados, se precipita muy rápidamente. Según datos n de especialistas militares, durante la actual guerra en Afganistán, de las Fuerzas Armadas estadounidenses desertaron cerca de quince mil militares.
Como contra medida a los suicidios, en 2009 se creó en los EE.UU. una estructura especial, denominada Las Fuerzas de Prevención de los suicidios en las Fuerzas Armadas (Army Suicide Prevention Task Force). Este organismo se dedica al desarrollo de los programas especiales para reducir los suicidios. Además se implementaron otras medias, pero según fuentes oficiales estadounidenses la cantidad de los suicidios sigue aumentando.