El presidente Jair Bolsonaro celebró el domingo (19 abr 2020) el Día del Ejército Brasileño junto a centenares de manifestantes que, aglomerados pese a la pandemia del coronavirus, lo vivaron y reclamaron una intervención militar que cierre el Congreso y el Supremo Tribunal Federal (STF), en una marcha que intensificó la tensión institucional y fue repudiada por gobernadores y jueces del máximo tribunal judicial de Brasil. El hecho desató múltiples expresiones condenatorias en buena parte del arco político y judicial brasileño, según lo publica el lunes en su edición digital el diario Clarín en un artículo firmado por su corresponsal en Brasilia Guido Nejamkis.