Señor Director: Es lamentable que no se le encuentre solución al problema de los menos delincuentes. En algunos Estados de los EE. UU las escuelas primarias organizan visitas de “conocimiento” a una cárcel y después de recorrer lugares que infunden temor; un preso de buena conducta les da una explicación de lo que les puede ocurrir si llegan a parar a una cárcel.