Comenzó el viernes (12 sep 2014) un juicio administrativo contra tres efectivos policiales, que integran la comisión provisoria del Sindicato de Policías y Penitenciarios (Sinpope), en tanto una marcha de apoyo a los acusados afuera de la Jefatura, marcó el tono de una delicada situación que se vive en la policía neuquina tras el atentado a balazos contra el subjefe de la institución, comisario general Raúl Liria.
De acuerdo a lo informado por el diario Rio Negro, en un despacho procedente de la capital neuquina, Sergio Arregui, secretario general; Maximiliano Serrano, secretario adjunto; y Cristian Segura, secretario de Derechos Humanos; " fueron pasados a disponibilidad y tienen un juicio policial en un plenario administrativo de carácter público por el hecho de haberse sindicalizado", indicaron desde el gremio que no es reconocido por el gobierno, pero que tiene el apoyo de la CGT.
"El juicio empezó con un problema gravísimo porque el defensor de Arregui, el subcomisario Pablo Silva, no se pudo presentar porque fue amenazado que si se presentaba le iban a balear y quemar la casa", denunció públicamente. "Nadie lo está representando a Arregui. Los otros dos si tienen defensor", añadió.
Urrutia aseguró que el juicio se realiza por la sindicalización de la fuerza; en cambio, desde la policía argumentaron que es por faltas administrativas.
