Entre 1973 y 1974, el Ejército Revolucionario del Pueblo lanzó sus peores ataques, aún cuando Argentina estaba en democracia. La decisión de crear una “guerrilla rural” que hasta Fidel Castro tildó de delirante. Los crímenes de 10 oficiales del Ejército y el martirio y asesinato del coronel Jorge Ibarzábal y el mayor Larrabure.