Aparentemente el final del acto se dispuso cuando el vicepresidente Amado Boudou y el gobernador Juan Manuel Urtubey se habrían levantado para retirarse, cerca de las 13.
“No nos dejan desfilar porque dicen que ya terminó el acto; esto no solo es una improlijidad, es un grave error de la organización porque venimos de muy lejos para participar y nos dejan afuera del acto”, sostuvo uno de los gauchos que estaba molesto por la decisión que minutos antes había anunciado el locutor oficial de la ceremonia.
No hubo ninguna voz oficial que explicara la situación que dejó a fortines que hicieron hasta 300 kilómetros para asistir a la fiesta del Bicentenario de la Batalla de Salta., concluyó el comentario de El Tribuno.