La presidenta recordó el embargo y retención de la Fragata Libertad en Ghana, en 2012, para asegurar que fue un “día histórico” el de su regreso a Mar del Plata (el 9 de enero de 2013). “Tuvimos la fortaleza de no ceder a las presiones”, completó el paralelismo con las decisiones de su Gobierno en la disputa con los fondos buitre.

En la cena, Cristina volvió a compartir mesa con su cuestionado jefe del Ejército, el teniente general César Milani, a quien ha sostenido a rajatabla a pesar de las denuncias en su contra por supuestas violaciones a los derechos humanos.

Unica oradora de la noche, antes de pasarse a la entrada de mousse de salmón con hojas verdes y al plato principal de solomillo de cerdo relleno laqueado a la miel con papines al romero y mix de verdes al wok, la Presidenta leyó un largo listado que le armó la cartera de Defensa que conduce Agustín Rossi, con obras, acciones y proyectos del área.

Prometió que el rompehielos Almirante Irizar estará disponible el año próximo. Sostuvo que el 95% del espacio aéreo está radarizado y justificó la adquisición por US$ 30 millones de uniformes chinos porque “no daba el tiempo” y Estados Unidos “también” los compra a China. En otro orden, reivindicó la participación de unidades militares en tareas sociales en villas de emergencia y en la asistencia de catástrofes naturales.

La Cena es el evento protocolar más importante del año para los militares. Se realiza en torno al 9 de julio, pero esta vez venía con postergaciones, a causa de la faringolarongitis de la Presidenta y otras razones de agenda. Igual, la principal expectativa castrense ya había tenido respuesta el 29 de mayo, cuando Rossi anticipó el aumento salarial para las Fuerzas Armadas.

Para el postre –capuccino con esponja de chocolate– seguían en la mesa con Cristina, además de Milani, los jefes del Estado Mayor Conjunto, teniente general Luis María Carena; de la Armada, almirante Gastón Erice; y de la Fuerza Aérea, brigadier general Mario Callejo. En otra mesa cercana estaba otro miembro muy cuestionado del Gobierno, el procesado vicepresidente Amado Boudou.