Carta de lectores publicada en www.lanacion.com.ar
El 24 de marzo de 2006, el presidente Kirchner logra, a través del Congreso, que se declare feriado el Día Nacional por la Memoria, por la Verdad y la Justicia. Ese día comenzaron el relato, la mentira y la injusticia.
En 1976 ya se llevaban varios años de combate contra las organizaciones terroristas que asolaban a la patria y produjeron 1050 asesinatos, 1748 secuestros, 45 copamientos de cuarteles militares, policiales y de seguridad, 20 copamientos de localidades, 5215 atentados con explosivos, 1052 atentados incendiarios, 551 casos de robos de dinero, 2402 robos de armamento, 17 hechos de robos de uniformes, 73 hechos de robos de material sanitario, 80 copamiento de fábricas, etcétera. Desde 1971 existieron tres cámaras federales en lo penal que juzgaban y condenaban o liberaban los detenidos. En 1973, el gobierno de Cámpora abolió las tres cámaras y liberó a todos los terroristas detenidos, que iniciaron la persecución de los jueces, mataron al juez Quiroga, atentaron contra otro y el resto de los exjueces se fueron del país. Así se llegó a tener la Argentina en una situación de caos extremo. Todo el arco político, la Iglesia, los empresarios, etcétera, pedían a las FF.AA. un golpe de Estado y ordenar el país. Las organizaciones guerrilleras por su parte querían hacer un golpe de Estado y convertir a la Argentina en Cuba. Tenían el apoyo de la Unión Soviética, de Chile, de Libia, los palestinos y Cuba. Todo ese marco de situación llevó a las Fuerzas Armadas a un golpe de Estado no deseado, a una guerra no buscada y que pese a haberse triunfado con las armas se perdió en lo cultural. Durante años los terroristas han sido homenajeados como víctimas en el muro de la memoria en Buenos Aires y sus familiares compensados económicamente. ¡Ha llegado el momento de contar la historia completa!
Teniente Coronel VGM (R) Lucio Candia
Unión de Promociones - Delegación Mendoza