Empezamos el año leyendo primeras planas de los diarios referidas a una “purga” en los mandos del Ejército, por pasar a la situación de retiro a generales de la Nación. ¡Cuánta ignorancia!

En las democracias bien constituidas se recambian las cúpulas cada cuatro años a mitad del ejercicio del gobierno de turno, para que haya continuidad y no se pierda la valiosa experiencia que han adquirido los oficiales a lo largo de 35 años de carrera. La elección de las nuevas autoridades se realiza entre los más antiguos a fin de evitar estas pérdidas de capacitación y perfeccionamiento. El presupuesto en Defensa significa hoy menos del 1% del PBI. Las Fuerzas Armadas no son la causa del déficit fiscal en lo más mínimo. Las política no debe entrar a los cuarteles, eso lo hemos aprendido a lo largo de nuestra historia. Hoy vemos a la política usando a las Fuerzas Armadas para hacer proselitismo con títulos rimbombantes y demagógicos. La purga se debe hacer en otros ámbitos de la administración pública, donde sobran centenares de cargos extras escalafonarios con sueldos muy superiores a los de un general y, seguramente, estos sí son designados a dedo por los partidos de turno y no producto de una extensa trayectoria.

GB (R) Claudio Eugenio Amieva Correa

DNI 12.233.337

Publicado en www.lanacion.com.ar